El exjefe de la policía de Honduras Juan Carlos "Tigre" Bonilla fue acusado el jueves de narcotráfico ante una corte federal de Nueva York, anunciaron la agencia antidrogas estadounidense DEA y el departamento de Justicia.
Bonilla, exjefe de la policía nacional de Honduras en 2012 y 2013, "usó presuntamente su alto rango para influir en quienes trabajaban para él y para proteger mediante el uso de la violencia a los narcotraficantes con conexiones políticas que enviarían cocaína a Estados Unidos", dijo la agente especial de la DEA Wendy Woolcock al anunciar los cargos en un comunicado.
El fiscal de Manhattan Geoffrey Berman dijo que Bonilla, de 60 años, es acusado de supervisar el envío de múltiples toneladas de cocaína hacia Estados Unidos a pedido del hermano del presidente de Honduras, el exdiputado Juan Antonio "Tony" Hernández, condenado por narcotráfico en Nueva York en octubre y quien será sentenciado el 29 de junio.
Bonilla también es acusado del uso de armas de fuego para cometer los delitos, y del uso de extrema violencia, incluido el asesinato de un narcotraficante rival.
Prófugo de la justicia, Bonilla enfrenta una pena máxima de cadena perpetua si es condenado en Estados Unidos.
Parte de las pruebas que apoyan la inculpación de Bonilla salieron a relucir durante el juicio de Tony Hernández en una corte federal de Manhattan en octubre pasado, dijo la fiscalía.
El exjefe de la policía hondureña protegía a cambio de sobornos a narcos como Tony Hernández "y al menos uno de los hermanos de Hernández Alvarado, que es un excongresista de Honduras y el actual presidente de Honduras" Juan Orlando Hernández, mencionado en la inculpación, dijo la fiscalía en el comunicado.
Los sobornos no se pagaban en efectivo sino en kilos de droga. Bonilla permitía así el pase de la cocaína por retenes policiales sin que fuesen inspeccionados o incautados, según la acusación.
También otorgaba a los narcos con conexiones políticas, incluido a Tony Hernández, "información policial sensible para facilitar los embarques de cocaína, incluida información sobre operaciones de interdicción aérea y marítima", sostuvo la fiscalía.
La inculpación asegura asimismo que en torno a julio de 2011, cuando ya trabajaba en la policía de Honduras, Bonilla participó en el asesinato de un narco rival a pedido de Tony Hernández y otras personas.
Durante el juicio del hermano del presidente de Honduras en Nueva York, el excapo del narcotráfico y exalcalde de la ciudad hondureña de El Paraíso, Alexander Ardón, dijo que Tony Hernández le indicó que había que asesinar a un rival, Franklin Arita, y que quien lo mató fue Bonilla, entonces jefe de policía del departamento de Copán.